SONDA DE GATO 1,3 x 130 mm. SIN FIADOR
¿Qué es?
La sonda de gato 1,3 x 130 mm sin fiador es un dispositivo médico utilizado en procedimientos de cateterización urinaria. Está diseñada para introducirse en la uretra y llegar hasta la vejiga, permitiendo el drenaje de la orina acumulada en el sistema urinario.
Modo de empleo
Antes de utilizar la sonda de gato, es importante lavarse las manos y colocarse guantes estériles para garantizar la asepsia. A continuación, se debe preparar el equipo necesario, que incluye una solución antiséptica, una jeringa con lubricante estéril y una bandeja para desechar los materiales utilizados.
Una vez preparado el equipo, se debe ubicar al paciente en una posición cómoda, preferiblemente acostado sobre su espalda. Se procede a limpiar la zona genital con la solución antiséptica, asegurándose de eliminar cualquier residuo o bacteria presente.
A continuación, se toma la sonda de gato y se aplica una pequeña cantidad de lubricante estéril en la punta. Con cuidado, se introduce la sonda en la uretra del paciente, avanzando lentamente hasta llegar a la vejiga. Es importante tener precaución para evitar causar daño o molestias al paciente.
Una vez la sonda ha llegado a la vejiga, se conecta una bolsa de drenaje a la sonda para permitir el flujo de orina. Se debe asegurar que la sonda esté correctamente fijada al paciente para evitar su desplazamiento.
Es importante seguir las indicaciones del médico o profesional de la salud para el uso adecuado de la sonda de gato, así como para su cuidado y mantenimiento.
¿Qué es?
La sonda de gato 1,3 x 130 mm sin fiador es un dispositivo médico utilizado en procedimientos de cateterización urinaria. Está diseñada para introducirse en la uretra y llegar hasta la vejiga, permitiendo el drenaje de la orina acumulada en el sistema urinario.
Modo de empleo
Antes de utilizar la sonda de gato, es importante lavarse las manos y colocarse guantes estériles para garantizar la asepsia. A continuación, se debe preparar el equipo necesario, que incluye una solución antiséptica, una jeringa con lubricante estéril y una bandeja para desechar los materiales utilizados.
Una vez preparado el equipo, se debe ubicar al paciente en una posición cómoda, preferiblemente acostado sobre su espalda. Se procede a limpiar la zona genital con la solución antiséptica, asegurándose de eliminar cualquier residuo o bacteria presente.
A continuación, se toma la sonda de gato y se aplica una pequeña cantidad de lubricante estéril en la punta. Con cuidado, se introduce la sonda en la uretra del paciente, avanzando lentamente hasta llegar a la vejiga. Es importante tener precaución para evitar causar daño o molestias al paciente.
Una vez la sonda ha llegado a la vejiga, se conecta una bolsa de drenaje a la sonda para permitir el flujo de orina. Se debe asegurar que la sonda esté correctamente fijada al paciente para evitar su desplazamiento.
Es importante seguir las indicaciones del médico o profesional de la salud para el uso adecuado de la sonda de gato, así como para su cuidado y mantenimiento.
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